Las hemorragias nasales, también conocidas como epistaxis, son eventos comunes que pueden ocurrir en cualquier momento. Es fundamental saber cómo actuar en caso de que te enfrentes a una situación de este tipo. En este artículo, te proporcionaremos información valiosa sobre cómo manejar una hemorragia nasal y cuándo es necesario buscar atención médica.
Pasos para Manejar una Hemorragia Nasal:
- Coloca a la persona en una posición sentada: En caso de una hemorragia nasal, es esencial que la víctima se siente en una posición cómoda. Esto ayudará a evitar mareos o caídas debido a la pérdida de sangre.
- Inclina la cabeza hacia adelante: A diferencia de la creencia popular, no inclines la cabeza hacia atrás, ya que esto puede provocar que la sangre fluya hacia la garganta, lo que puede causar molestias e incluso náuseas. En su lugar, pide a la víctima que incline la cabeza hacia adelante ligeramente.
- Presiona la parte blanda de la nariz: Dile a la persona afectada que respire por la boca y que apriete suavemente la parte blanda de la nariz con los dedos. Esto ayudará a detener el flujo de sangre.
- Mantén la presión durante 10 minutos: Es importante mantener la presión sobre la nariz durante al menos 10 minutos. Esto permitirá que el coágulo se forme y detenga la hemorragia.
- Aplica hielo: Después de que la hemorragia haya cesado, puedes aplicar una bolsa de hielo envuelta en un paño en el caballete de la nariz durante unos 15-20 minutos. Esto ayudará a reducir cualquier hinchazón residual y prevenir futuras hemorragias.
- Limpieza y precauciones: Una vez que la hemorragia se haya detenido por completo, la persona afectada puede limpiar suavemente alrededor de la nariz con un paño húmedo. Se le debe instruir a no sonarse la nariz y evitar la actividad física intensa durante al menos 12 horas.
Cuándo Buscar Atención Médica:
Es importante recordar que, en algunos casos, una hemorragia nasal puede requerir atención médica. Debes consultar a un profesional de la salud en las siguientes situaciones:
- Hemorragia nasal que dura más de 30 minutos.
- Si la hemorragia nasal es resultado de un golpe en la cabeza.
- Si las hemorragias nasales son frecuentes (más de una por semana), ya que esto podría ser un síntoma de presión arterial alta.
- Si la persona que experimenta hemorragias nasales toma anticoagulantes.
- Si las hemorragias nasales frecuentes se acompañan de hemorragias en las encías o hematomas inexplicables.
Recuerda que la prevención es clave para reducir el riesgo de hemorragias nasales. Mantener el interior de la nariz hidratado y evitar la irritación excesiva, como la exposición a aire seco o el uso excesivo de pañuelos de papel, puede ayudar a prevenir futuras hemorragias nasales.
Siempre es esencial buscar atención médica si tienes preocupaciones o dudas sobre una hemorragia nasal. La seguridad y el bienestar son lo más importante.